La vida
(un ejercicio de humildad)
De veras, como puedo saber quién soy
ni por qué me trajeron a esta orilla,
si lo que ayer vi florecer con esplendor,
hoy se apaga, como el fuego en la colilla.
¿Acaso alguien decide por su cuenta en su destino?
¿Por qué andamos de la nada hacia la nada,...
sin tener la joven y tenue luz de una alborada,
que alumbre suavemente cada vuelta del camino?
La pequeñez de mis obras en nada justifica,
si no que niega en rotundo mi presencia,
pero naturaleza es desconcierto, es misterio y elocuencia.
Todo llega, todo viene y todo pasa,... y todo pasa...
Aquellos que poseían todo, desnudos retornan al universo.
Yo nada tuve, irme quiero, en paz, con una sonrisa y con un beso.
ni por qué me trajeron a esta orilla,
si lo que ayer vi florecer con esplendor,
hoy se apaga, como el fuego en la colilla.
¿Acaso alguien decide por su cuenta en su destino?
¿Por qué andamos de la nada hacia la nada,...
sin tener la joven y tenue luz de una alborada,
que alumbre suavemente cada vuelta del camino?
La pequeñez de mis obras en nada justifica,
si no que niega en rotundo mi presencia,
pero naturaleza es desconcierto, es misterio y elocuencia.
Todo llega, todo viene y todo pasa,... y todo pasa...
Aquellos que poseían todo, desnudos retornan al universo.
Yo nada tuve, irme quiero, en paz, con una sonrisa y con un beso.
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